El olvido cósmico.

El conocimiento que tenían las culturas antiguas en nuestro planeta, nos habla de que existían o era más común, que en nuestros tiempos el vinculo humano-terrestre con el cosmos. Grandes culturas del “mundo antiguo” como la Maya, Sumeria, Egipcia, Inca, los pueblos amerindios y entre otros más, contienen una riqueza profunda respecto a ellos y todo lo que les rodea. La ubicación que tenían respecto de sí mismos y su relación con el universo les ayudó a mantener identidad y sobre todo contactos con seres extraterrestres.

Sus historias nos enseñan cómo llegaron al planeta y que papel les tocaba ejercer. Las representaciones simbólicas dentro de su vida espiritual y cotidiana son de aspectos de gran sentido cósmico. Con el paso del tiempo la humanidad se ha ido alejando de esa interacción, pero no completo. Parece ser que la humanidad actual esta como en una especie de cuarentena, alejada de ese gran vinculo que disfrutaban nuestros ancestros.

El hecho de que hayan existido guerras a lo largo del desarrollo en nuestra humanidad, nos refleja una separación, una falta de unidad, que a la vez es comprensible que distintas civilizaciones humanas, que dicen representar a cierta cultura extraterrestre se hayan separado.  Si estas civilizaciones por medio de guerras se separaron, es factible que haya una separación del vínculo humano y extraterrestre, por ende una disminución de contactos con esos seres

 El vínculo nunca se ha roto, ha disminuido de manera considerable, y mejor aún, va en aumento. La humanidad actual necesita recordar y transmitir ese reconocimiento, ya que se ha estado en un olvido cósmico, distraída en guerras, asuntos de separación y no de unicidad. Al momento en que nuestra humanidad actual logre recordar y transmitir nuestra historia cósmica, sabremos a donde ir. ¿A dónde iremos? Iremos al principio otra vez, de dónde venimos. Al cosmos

Fabian Latxica