miércoles, 28 de mayo de 2014


Este artículo está concebido por y para aquellos que han perdido su hogar de forma injusta e inaceptable. En España estamos siendo testigos de como infinidad de familias son privadas de un techo en donde refugiarse. Años atrás nadie podía imaginar el drama humano que se avecinaba sobre este, nuestro país. Los ciudadanos fueron vilmente engañados por los poderes conspirativos. Una economía ficticia se abrió paso haciendo creer al pueblo que su país, era una nación avanzada. Jóvenes confiados abandonaron sus estudios debido a los grandes sueldos que se pagaban por ejercer trabajos básicos, oficios que no precisaban de apenas formación. ¡Habíamos arribado a la plena evolución social!

La gente se habituó a vivir por encima de sus posibilidades, confundidos por diversos gobiernos oligárquicos. Cuando toda "la obra de teatro" se desmontó, el caos imperó, ensombreciendo a un país de sonrisas. Los ciudadanos perdieron sus trabajos, pero las hipotecas concedidas por los bancos debían ser pagadas rigurosamente. Muchos no pudieron afrontar tal magna adversidad, sucumbiendo al abatimiento. Niños contemplando como "agentes de la ley" les arrebataban sus hogares. Madres sollozando, padres impotentes, el fin del estado del bienestar había comenzado.

Actualmente los bancos poseen miles de viviendas, vacías en su mayoría. ¿Alguien comprende que haya almas vagabundas, existiendo hogares sin almas?

Compartid este artículo, que llegue hasta los confines de la Tierra.

Jesús Kuicast.

0 comentarios: