Escribir sobre Minecraft es un poco como jugarlo, no sabes
muy bien por donde empezar y, sobretodo, no sabes cuando vas a acabar. Así que,
empecemos por el principio:
Uno se puede preguntar, ¿qué es Minecraft?
Bien, Minecraft es un videojuego de construcción en mundo
abierto. Su versión completa se lanzó en noviembre de 2011 y desde entonces lo
hemos visto tanto en PC como en versión para
Android, iOs e incluso xBox.
Pero la pregunta realmente abarca bastante más que eso. Y es
que Minecraft se ha convertido en un universo paralelo de creaciones
impresionantes, donde miles de personas dejan volar su creatividad y se
divierten excavando minas, construyendo ciudades enteras y matando o huyendo de
los zombies, esqueletos, arañas y demás elementos peligrosos del juego. Y es
que todos los que hemos jugado alguna vez conocemos esa sensación de acabar una
obra arquitectónica digna del Renacimiento y que, cinco minutos después, llegue
un Creeper (éstos explotan al acercarse a ti) y destroce tu casa, tus vaquitas,
tus plantas y, por supuesto, a ti mismo.
Puedes realizar construcciones utilizando materiales en
forma de cubo, que consigues explorando el entorno y recogiendo materias primas
para crear más material de construcción, las posibilidades son realmente
amplias. A continuación un par de ejemplos de construcciones en Minecraft:
Aunque claro, todo depende del tiempo libre que se tenga,
estas maravillas requieren mucho, mucho tiempo y esfuerzo.
Existen principalmente dos modos de juego a seleccionar:
Supervivencia o Creativo. En el modo supervivencia tenemos una barra de vida
con 10 corazones, que podemos perder por no alimentarnos, envenenándonos o,
simplemente, porque nos maten. Además, tendremos que construir una mesa de
crafting con la que procurarnos todas las herramientas y armas necesarias para
empezar (hacha, espada, pala, etc.). Además, en este modo de juego, por la
noche los monstruos nos atacarán sin descanso, por lo que tendremos que luchar
o huír (normalmente lo segundo). Para 'escapar' de los monstruos, tendrás que
construir un refugio, para lo que necesitarás materias primas como madera, roca
o arena, para hacer cristal. Como veis, al principio no todo es tan fácil si
jugamos con este modo, aunque al final supongo que será más gratificante.
Además de la barra de vida, también tenemos una barra de hambre, que debemos
mantener estable o, de lo contrario, moriríamos de una forma relativamente
lenta. Todo esto se complementa con una barra de experiencia, que conseguimos
llenar matando monstruos y picando o fundiendo bloques.
En el modo creativo es donde podemos desarrollar totalmente
nuestra faceta artístico-arquitectónica, ya que tenemos recursos ilimitados
tanto de bloques como de objetos, por lo que no necesitamos ni recolectar, ni
picar, ni fundir, ni craftear, sólo construir. Además, no debemos preocuparnos
de los monstruos, ya que no nos atacan.
Así pues, tanto si lo único que quieres es tener tu granjita
llena de vacas, cerdos, ovejas y demás (que por supuesto, se puede), con tus
huertos de árboles frutales al más puro estilo de la huerta, como si prefieres
dedicarte a la recolección de cadáveres de monstruos, haciendo estragos en las
minas y demás, este es un sitio en el que te sentirás, de hecho, bastante
poderoso.
Plague
0 comentarios:
Publicar un comentario