Algunos afirman que nuestra
generación (Los 90 hasta la actualidad) somos los “mejores preparados”, ya que
tenemos a nuestro alcance mayor posibilidad de acceso a la información que el
que tuvieron nuestros padres y abuelos. Bueno, esto es relativamente cierto.
La educación pública
española no solo es gratuita y universal (Al menos en teoría, en la práctica te
sablean en matrículas, tasas, seguros, material escolar, etc… Así que de
gratuita y universal tiene poco) si no que también es deficiente, muy muy deficiente.
El sistema educativo español se basa en clases excesivamente saturadas de
alumnos (Compárese el máximo de 20 alumnos por clase en los países nórdicos con
los 30 alumnos por clase en España) lo que imposibilita una enseñanza de
calidad, además de que tampoco se enseña a los alumnos a resolver eficazmente
los problemas que se puedan presentar en la vida cotidiana, estando dicha
capacidad de resolución muy por debajo de la media europea y únicamente por
delante de países como Eslovenia o Serbia. Otro defecto de la educación
española es el pésimo nivel de cultura general de nuestros alumnos. Resulta
verdaderamente bochornoso que la mayoría de los jóvenes no sepan los ríos o
provincias de España, o que no sepan quién fue Adolfo Suárez. Por no hablar del
pésimo nivel de idiomas que tienen nuestros alumnos, lo cual se puede confirmar
con la excelente demostración que hizo un chico en el Parlamento Europeo (Que
finaliza con una vergonzosa imitación de Ylenia, la choni rubia de Gandia
Shore) cuyo vídeo os adjuntaré al final del artículo. Yo mismo me di cuenta de
las deficiencias respecto a los idiomas cuando nos visitaron en la facultad
alumnos alemanes de arqueología, los cuales dominaban a la perfección el
inglés, el alemán, el francés, el castellano y el italiano. El desconocimiento
de idiomas por parte de la mayoría nuestro alumnado únicamente perjudica a
nuestros estudiantes, que se verán incapaces de competir contra nuestros socios
europeos.
Por otra parte, en la aulas
se ha fomentado la ley del mínimo esfuerzo, siendo posible pasar de curso con
varias asignaturas suspensas (Esto resultaría impensable en países normales),
lo cual fue idea de nuestro excelentísimo expresidente Zapatero, que cargado de
buenas intenciones, disminuyó el nivel exigido en las aulas para evitar el
abandono escolar. Pero, ¡Cuán grande fue su sorpresa al ver que el efecto fue
justo el contrario! Situándose la tasa de abandono escolar en unas de las más
altas de Europa (Concretamente un 23,9% en el 1º Trimestre de 2013), lo
que me parece vergonzoso y humillante.
Todos estos problemas en el
sistema educativo, sumados a los ya existentes como el aumento del precio de
los libros de texto o las tasas universitarias, han derivado en una falta de
interés hacia los estudios y la cultura por parte de los jóvenes españoles.
Fiel reflejo de ello son los ídolos de la juventud, como los tronistas de
Mujeres y Hombres Y Viceversa o los protagonistas de Gandía Shore. Gracias a la
telebasura, mi generación se ha convertido en una generación de apáticos, sin
interés ni preocupación por su formación y futuro. Una generación que lo único
que han leído han sido los estados de Tuenti o Twitter con unas faltas de
ortografía que harían llorar a Miguel de Cervantes. Una generación que
desprecia la lectura, que es por excelencia el medio básico para la propagación
de la cultura, ya que consideran a esta como aburrida. En lugar de todo ello
prefieren imitar a sus ídolos de la telebasura, es decir, ganando el mayor
dinero con el menor esfuerzo posible. Se preocupan por tener un físico perfecto,
y en este vano intento por alcanzar la belleza perfecta, olvidan cultivar su
mente. De nada te sirve tener cuerpo de escultura griega si tienes la cabeza
tan hueca como estas.
Esta incultura y falta de
interés se traducen en ausencia de espíritu crítico, siéndole completamente
indiferente la situación nacional, convirtiendo así a la juventud en una masa
carente de capacidad de reacción y fácilmente manipulable. Los únicos
beneficiados son los políticos, que podrán seguir manteniendo sus privilegios y
robando impunemente mientras siguen presentándonos su decrépito y deficiente
sistema como democracia idílica. Mientras tanto, los perjudicados seremos España
y los españoles. Los españoles porque, debido a la falta de formación, se verán
incapaces de obtener un trabajo que les permita vivir dignamente; y España
porque, a este paso, nos convertiremos en un país tecnológica y culturalmente
atrasado, lo que conllevará ser un país de segunda, esos de los que se
aprovechan los países fuertes, en lugar de ser un país de primera y tener
influencia en la política global, que es el puesto que nos corresponde.
NOTA: En este artículo me he
referido de forma general al alumnado español, es decir, que también hay
excepciones, también tenemos alumnos con un excelente nivel de preparación.
¿Pero dónde están esos alumnos? En el extranjero, ya que en nuestro país no
encuentran trabajo ni salida a su formación. Ya tenemos otra cosa más que
agradecer a los políticos.
Bibliografía:
-Tasa de abandono
escolar: https://www.mecd.gob.es/dctm/inee/documentos-de-trabajo/abandono-educativo-temprano.pdf?documentId=0901e72b8173034a
-Nivel pésimo de inglés en
el Parlamento Europeo, ridículo de España: https://www.youtube.com/watch?v=0Cr8tn8s6yU
-Los jóvenes españoles no
saben quién es Adolfo Suarez: https://www.youtube.com/watch?v=mMIEY0RgubA
Artículo escrito por Fran Hortal.
#EspañaDespierta
#SpanishRevolution
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