Todo el país se halla
tremendamente conmocionado antes las declaraciones del apodado "pequeño
Nicolás". El pasado sábado día 22 de noviembre pudimos contemplar
estupefactos la entrevista que este joven de veinte años concedió a "Un
tiempo nuevo", programa presentado por Sandra Barneda. En este programa,
centrado básicamente en las cuestiones políticas y sociales de España, el “pequeño
Nicolás” nos contó su versión sobre lo acaecido en su vida, así como el motivo
por el cual había saltado a la palestra, siendo acusado de cosas indignas amén
de imposibles. Las caras de póker de aquellos periodistas que tuvieron la
oportunidad de entrevistarle fueron dignas de ser retratadas por un pintor de
cámara. Según la narración de Francisco, todas las grandes instituciones del
estado estarían involucradas en sus actividades dantescas que lo convierten en
un supuesto espía-mediador-negociador. El veinteañero se desenvolvió bien ante
las profundos y curiosos interrogantes que los periodistas planteaban. Un
vocabulario exquisito, una fluidez lingüística madura y una personalidad
vehemente y ciertamente altiva.
Semanas atrás el "escándalo
del pequeño Nicolás" saltaba a los medios como un caso enigmático y cuanto
menos kafkiano. Se han podido visualizar fotografías en las que el “joven
conservador” aparece acompañado de políticos de gran envergadura, e incluso
imágenes en la mismísima proclamación real de Felipe VI, al que fue invitado; prueba
que demostró públicamente el pasado sábado en el programa nocturno de
Telecinco. Muchos son los que se aventuran a tacharlo de farsante y
pretencioso, mas son bastantes más los que nos inclinamos a pensar que lo que
este chico nos ha relatado podría ser absolutamente cierto. Al día siguiente de
que Francisco Nicolás vertiera tales declaraciones, las instituciones acusadas
por el joven de colaborar con él, emitieron comunicados negando rotundamente
tales colaboraciones con el sujeto. Esto es un claro síntoma de la necesidad de
su desacreditación en aras de poder
neutralizarlo.
¿Por qué confiaría el Centro Nacional de
Inteligencia misiones de tal trascendencia nacional a un joven estudiante?, ¿era
el nexo de unión secreto entre las distintas instituciones del estado? Miles de
cuestiones se me ocurren a mí y a todos ustedes en este preciso momento. Sin
embargo la certeza es que no sabemos definitivamente nada. Todo son meras
especulaciones acerca de un chico que ha puesto en jaque a todo un país. En la
entrevista sabatina no dudó en afirmar que si algo le sucediese todas las
informaciones de carácter sensible que tiene en su poder saldrán a la luz
irremediablemente, conllevando esto la inmediata dimisión de "grandes
peces gordos" del sistema.
En las cáusticas declaraciones
proferidas por Francisco Nicolás en "Un tiempo nuevo" encontramos
afirmaciones como la de haber estado en ático de Ignacio González. También nos
relató como el Rey Don Juan Carlos había contestado a alguno de sus mensajes.
Mas agárrense fuerte, porque el gabinete de vicepresidencia del gobierno le
habría encomendado la labor de encargarse del tema Pujol.
Según mi criterio meditativo, las
afirmaciones del pequeño Nicolás podrían ser ciertas, y verdaderamente sería un
peligro para "los amos nacionales". Estamos habituados a ver y
escuchar noticieros repletos de sucesos, ¿quién dice que el "pequeño
Nicolás" no podría ser protagonista de una trágico final sin explicación?
Si de veras este señor posee en sus haberes material altamente confidencial que
pudiera repercutir directamente en la sociedad española, mi consejero sería que
lo guardase todo y se alejase de aquellos límites que es mejor no traspasar,
porque una vez que se cruza la línea prohibida ya no hay marcha atrás sin
consecuencias.
Artículo escrito por Jesús Kuicast.
1 comentarios:
Antes de hacer supuestos sobre un organismo tan delicado como el CNI, creo que deberías informarte tanto del término de acción como de la manera propiamente dicha en la que se actúa. Desde luego, no es como en las películas.
Son profesionales todos los que trabajan allí (como puedes imaginar)y creo que tampoco hace falta nombrar la falta de profesionalidad o sentido común en el supuesto de que tal sujeto sea quien tu dices. Infórmate y no engañes a la gente, no tienes derecho.
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