viernes, 2 de octubre de 2015



Estimados y considerados lectores, tras un breve periodo de reflexión existencial, retorno colmado de clarividente sentido común, en aras de proseguir con mi arduo menester opinante. Nos hallamos en tiempos ciertamente convulsos, pues acontecen diversos sucesos dentro y fuera de nuestra patria común. Harto injusto sería no pronunciarme acerca de aquellos asuntos claves que lamentablemente obnubilan la mente del mundo. Sin más dilación procederé a exponer el asunto que en el día presente me ha sido encomendado.

Ríos de tinta han corrido como causa de la desafortunada aparición del movimiento comunistoide Podemos. Desde que en enero de 2014 se constituyera como partido político español esta pseudoreligión, liderada por el "mesías" Pablo Iglesias Turrión, no ha cesado de provocar auténticos quebraderos de cabeza a todos aquellos que somos fieles de la lógica axiómica. Pablo Iglesias, autoerigido como "Justiciero social y voz de los indefensos de España" nos ha dado una apabullante lección de cómo convertirse en un oportunista sublime. Un hombre que presentaba programas televisivos en canales televisivos locales, presuntamente financiados por regímenes dictatoriales, aprovechó la ardua coyuntura socioeconómica por la que atravesaba (y atraviesa) España para resurgir de la nada y asentarse sobre "el trono de la polémica". Su proceso no fue instantáneo, ya que sólo algunos canales de ámbito nacional como fue el caso de Intereconomía TV, tuvieron la paciencia y amabilidad de convidarlo a sus programas estrellas de debate político. El señor Iglesias frecuentó El gato al agua, uno de los mejor programas de tertulia política que existen en España. Es caóticamente paradójico que "el rojo de los rojos" asistiera a un programa de tendencia conservadora, ¿no sería más coherente no pisar el suelo de aquellos a los que osas vilipendiar sin mesura? Evidentemente. Empero, este sujeto no obedece a la virtud de la honestidad, pues es un claro amante de la hipocresía, repta como una serpiente en busca de sus viles intereses. Sus apariciones en programas nacionales de debate político se hicieron tan usuales que comenzó a gozar de una considerable fama nacional, y posteriormente internacional. El líder podemita demostraba ser un óptimo orador que transformaba los debates en los que participaba en auténticos mítines políticos. Mas todo tiene un principio y un final.

No obstante, no tardarían en arribar valiosas informaciones de la mano de grandes periodistas nacionales e internacionales sobre el turbio pasado de los "supremos líderes de la tribu podemita". Profesionales de la información hicieron gala de su valentía publicando en sus respectivos medios de comunicación las presuntas relaciones de colaboración entre el régimen venezolano de Maduro y el "partido más farisaico" de España. La cúpula de "la secta morada" determinó relegar a Monedero al más trágico ostracismo; las evidencias constatadas obligaron a los "Gurús" de Podemos ha blanquear su imaginen pública, desvinculándose del régimen venezolano. Tal echo supuso la inevitable expulsión de  Juan Carlos Monedero, ideólogo de Podemos. Sus excelencias pueden visitar youtube y encontrar elocuentes vídeos en los que Monedero muestra su profunda admiración por el difundo dictador comunista Hugo Chávez. De facto, las últimas informaciones señalan que Monedero trabajó como asesor privado del gobierno chavista para gestar el denominado "socialismo del siglo XXI", que es una suerte de  marxismo-leninismo adulterado con el objetivo de actualizar su contenido para la sociedad contemporánea (posmoderna-nihilista-tecnológica). Un infame modo de confundir a las buenas gentes del mundo. Aquellos ignorantes que osan defender públicamente a Podemos y a sus miembros habrían de contemplar en qué situación se hallan los países en los que rige esta locura ideológica. Venezuela, Bolivia, Ecuador, Argentina..., naciones hundidas por gobiernos totalitarios, sometidos a los dictados de "comunistas multimillonarios corruptos". ¿Hay mayor desvergüenza que la de estos tipejos, que declarándose defensores de los obreros y desvalidos, viven como auténticos ricos corruptos?

Las pretensiones utópicas de Pablo Iglesias y sus acólitos evidencian su ignorancia extrema sobre la realidad antropológica. Es por ello que un gobierno presidido por este señor y sus insensatos sería altamente pernicioso para la preservación de la salud democrática nacional, ya que la pseudoreligión marxista está intrínsecamente ligada a la negación de la libertad, en pos de un paternalismo estatal dictatorial. El credo comunista es tóxico para cada uno de los miembros de una sociedad así como para el conjunto de la misma. Los españoles han de entender e interiorizar mediante la lógica y la concienzuda observación, que la solución de la crisis económica pasa por el férreo apoyo a la derecha capitalista neoliberal: un sistema socioeconómico gracias al cual la humanidad ha experimentado un crecimiento exponencial sin precedentes. El capitalismo ha logrado el tan valorado estado de bienestar socioeconómico. Obviamente, sería propio de un necio negar que tal sistema sea claramente perfectible.

Muchos neófitos en cuestiones políticas se aventuran a tachar al gobierno actual de ser el único responsable de la miseria en la que se hallan sumidos muchos españoles. Nada más lejos de la realidad, pues cuando Mariano Rajoy fue elegido presidente del gobierno el 21 de diciembre de 2011, se dio de bruces con un legado socialista envenenado. Cuando la crisis económica mundial estalló, teniendo su epicentro en Estados Unidos, los gobiernos competentes comenzaron a tomar medidas para minimizar los daños de tamaña hecatombe, mientras que el gobierno socialista presidido por José Luís Rodríguez Zapatero negó que tal crisis estuviese sucediendo. Cuando el Partido Popular tomó las riendas del gobierno nacional, España estaba en una terrible recesión económica. Cada día se destruían innumerables puestos de trabajo. Sin embargo actualmente el gobierno popular ha logrado invertir la tendencia destructora: ahora España crece más que el resto de países de la Unión Europea, y cada día más gente encuentra empleo.

Podemos pierde votantes permanentemente, desinflándose como un gran globo. Pensaron que podrían sostener sus falacias hasta las cercanas elecciones generales, pero la verdad ha triunfado. Estamos asistiendo al hundimiento de Pablo Iglesias y su “partido”.

Queridos lectores, para concluir este breve tratado citaré una máxima del poeta griego Homero: "Odioso para mí, como las puertas del Hades, es el hombre que oculta una cosa en su seno y dice otra."


Artículo escrito por Jesús Kuicast.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Vaya chapucero, tendencioso artículo que no aporta nada nuevo a las varias biblias antipodemitas.Se limita a recpetir basura publicada por periodicuchos del pensamiento único o más bien del antipensamiento. Un poco más de brillantez , con rebuznar no es suficiente teniendo em cuenta que no soy admirador de Pablo, si le queréis atacar hacerlo con más rigor y lo mismo si queréis defender a Marianito el corto

Anónimo dijo...

Al primer comentarista. Tú si que eres tonto. Ahora resulta que no vamos a poder criticar al piojoso de la coleta. Lo tuyo sí que es pensamiento único.

Anónimo dijo...

todo con con Kuicast!!